En este tercer capítulo, Daniel del Toro nos habla del ingrediente fundamental de nuestras paellas: el arroz.
El arroz Sabroz es ideal para este tipo de paellas, ya que es un arroz redondo de larga cocción.
Eso significa que absorbe el caldo y absorbe todo el sabor. Y al ser de larga cocción el caldo se adhiere mejor al grano y nunca se nos pasa. Siempre queda en su punto, perfecto. En esta receta vamos a probar nuestro arroz Sabroz con los salmonetes.
Receta de arroz con salmonetes
Ingredientes
- Sabroz: 350 g de Arroz Sabroz
- Salmonetes
- 1,2 l de caldo de pescado
- Pimentón
- Pimienta
- Pulpa de ñora
- Hebras de azafrán
- Cúrcuma
- 75 g de tomate triturado
- Sal
- AOVE
Elaboración
Primero,
preparamos el caldo. Haremos un caldo con las
espinas de los salmonetes, sus cabezas y las verduras que queramos. En este caldo, en concreto, voy a incorporar también unas
espinas de gallo San Pedro que tenía en el congelador. Lo acompañamos con un
caldo de pescado o agua. Podemos darle color con un poco de azafrán y cúrcuma.
Mientras se hace el
caldo, preparamos el
sofrito de la paella. Como siempre, hacemos un sofrito simple, elaborado con un poco de aceite de oliva virgen extra, para tostar el pimentón; un par de cucharadas de pulpa de ñora y tomate triturado. También, añadimos un poco de pimienta.
Cuando el tomate haya perdido el agua,
salteamos el arroz Sabroz. En el capítulo anterior nos salió una
paella un poco gruesa, así que esta vez
echaremos 300 gr de arroz. Después de estar un par de minutos
salteando el arroz,
añadimos el caldo caliente, incorporando tres veces la cantidad de arroz que tenemos en la paella. Lo dejamos cocer 15 minutos y, luego, 3 minutos de reposo.
Cuando pasen unos 10 minutos de cocción, vamos a
colocar los salmonetes cortados encima de la paella.
Truco Sabroz
Utilizamos un soplete para
tostar la capa de arriba de los salmonetes, ya colocados encima de la paella. De esta forma, conseguimos que queden más caramelizados. Esperamos el tiempo que quede de cocción, después dejamos reposar el plato unos minutos. ¡Y listo para comer!