1 - Limpiar las navajas y preparar los ingredientes
Coloca las navajas en agua fría con sal durante al menos 30 minutos para que suelten cualquier arena o impureza que puedan contener. Este paso es clave para que las navajas queden perfectamente limpias antes de cocinarlas.
Mientras las navajas están en remojo, pica finamente los ajos, la cebolla y los pimientos (rojo y verde) en brunoise. Ralla el tomate para obtener solo la pulpa sin piel, y mide el resto de los ingredientes: el arroz Sabroz, el vino blanco, el pimentón dulce, las hebras de azafrán y la sal.
Prepara también la salsa de ajo, perejil y aceite, que añadirás al final para dar un toque fresco al plato.
2 - Cocer las navajas para prepararlas
Después de que las navajas hayan estado en remojo, enjuágalas bien bajo agua fría para asegurarte de que no queda ninguna impureza. Coloca las navajas en una olla con un poco de agua y caliéntalas a fuego medio-alto hasta que se abran, lo que debería tardar unos pocos minutos.
Es importante no cocerlas demasiado tiempo para que no pierdan su ternura. Retira las navajas de las conchas y resérvalas. Guarda algunas navajas con sus conchas para decorar el plato al final, lo que añadirá un toque visual atractivo y distintivo a la presentación.
3 - Saltear las navajas para un extra de sabor
A continuación, calienta un poco de aceite de oliva virgen extra (AOVE) en una sartén a fuego medio. Incorpora las navajas sin conchas y saltéalas ligeramente durante unos 2-3 minutos, hasta que estén doradas.
Este paso les dará un toque extra de sabor, añadiendo una ligera capa crujiente por fuera mientras mantienen su jugosidad por dentro.
4 - Preparar el sofrito para dar profundidad de sabor
En una paellera o sartén grande, añade un buen chorro de aceite de oliva virgen extra (AOVE) y caliéntalo a fuego medio. Incorpora los ajos, la cebolla y los pimientos cortados en brunoise. Sofríe lentamente, removiendo ocasionalmente, hasta que las verduras estén tiernas y doradas. Este proceso puede tardar entre 5 y 7 minutos, y es importante hacerlo lentamente para que los sabores se desarrollen bien.
Cuando las verduras estén bien cocinadas, añade el tomate rallado y cocina durante unos minutos más hasta que el sofrito espese ligeramente. Añade el pimentón y remueve para integrarlo en el sofrito.
Después, vierte un vaso de vino blanco y sube ligeramente el fuego. Deja que el alcohol se evapore completamente, lo que llevará aproximadamente 2-3 minutos, dejando solo el sabor fresco y aromático del vino en el sofrito. Esto aportará equilibrio y profundidad de sabor al plato.
5 - Tostar el arroz para sellar los granos
Con el sofrito listo, añade el arroz Sabroz a la paellera y remueve bien durante unos 2 minutos para que se impregne de los sabores y se tueste ligeramente.
Este paso es crucial porque tostar el arroz ayuda a sellar los granos, lo que asegura que mantengan su textura firme durante la cocción y absorban mejor los sabores del caldo.
6 - Cocinar el arroz con el caldo y ajustar los condimentos
Una vez el arroz esté tostado, añade el caldo caliente o agua (puedes usar el líquido resultante de la cocción de las navajas, colado para eliminar cualquier impureza). Remueve suavemente para distribuir el arroz de manera uniforme en la paellera.
Luego, incorpora el azafrán y una pizca de sal al gusto. Añade las navajas que has retirado de las conchas y mézclalas suavemente con el arroz.
Baja el fuego y deja que el arroz se cocine de manera uniforme durante unos 15-18 minutos, sin remover demasiado para evitar que el arroz libere almidón y se vuelva pegajoso.
7 - Incorporar las navajas para decorar el arroz
Cuando el arroz esté casi cocido y el líquido se haya reducido considerablemente, coloca las navajas con conchas que habías reservado en la parte superior del arroz como decoración.
Esto no solo hará que el plato sea más atractivo visualmente, sino que también asegurará que cada porción tenga una cantidad generosa de navajas.
8 - Dejar reposar para que se asienten los sabores
Una vez que el arroz esté cocido y las navajas estén bien integradas en el plato, retira la paellera del fuego y deja reposar durante unos 5 minutos.
Este reposo es crucial para que los sabores se asienten y el arroz termine de absorber el líquido restante, logrando una textura perfecta.
9 - Servir y decorar el arroz con navajas
Antes de servir, añade una generosa cantidad de salsa de ajo, perejil y aceite por encima del arroz.
Esta salsa fresca añadirá un contraste perfecto al plato, aportando un toque aromático y refrescante que realzará aún más los sabores del arroz con navajas.