Ponemos una cazuela con abundante agua. Cuando hierva, echamos el 
Freímos los huevos de uno en uno en aceite caliente y añadimos un poco de sal. ¡Y ya tenemos nuestro arroz a la cubana listo! Para servirlo, disponemos el arroz con la salsa de tomate por encima, los huevos y los plátanos a un lado.
Vídeo receta
Llega la noche y no sabemos qué cocinar. Queremos un plato fácil, sencillo y delicioso, el punto final perfecto para un día de rutina, una pequeña recompensa a las largas horas de trabajo, estudio, deporte o, por qué no, diversión. ¿Aún estás dudando la receta que vas a preparar? Antes de que sigas escuchando sugerencias que no llevan a ninguna parta, te traemos la solución: ¡arroz a la cubana! Daniel del Toro nos da las claves del éxito con un plato que levanta pasiones entre grandes y pequeños. Viaja al Caribe con una receta llena de sabor y sencillísima.
Arroz a la cubana, la receta perfecta para toda la familia
No hay nada mejor que un plato que guste a los grandes y pequeños de la casa, ¡una fiesta para todos lo miembros de la familia! El arroz a la cubana es una sencilla receta que nos vincula con nuestra infancia. Quién no recuerda esas comidas de fin de semana en los que mamá prometía hacernos este arroz tan divertido y sabroso: arroz blanco servido con forma de flan de molde, su salsa de tomate, un huevo frito y un plátano cortado en dos, también frito. Qué plato tan bonito, ¡era todo un manjar!
Hoy en día también le hacemos a nuestros hijos esta colorida receta que, además, es muy completa y nutritiva. Les aportará esa energía que tanto necesitan y puede ser perfectamente un plato único en un almuerzo o cena fácil para niños. Ellos lo celebrarán, ¡y nosotros encantados de saborearlo de nuevo! Nadie puede resistirse a esta fusión de sabores.
Comérselo no requiere de ciencia alguna, pero hay a quien le gusta la yema del huevo líquida para poderla usar como salsa y mezclarla con el resto de ingredientes; hay otros que la prefieren más seca e ir cogiendo con cada bocado un poco de cada ingrediente pinchado en el tenedor. De una u otra forma, el arroz a la cubana en una receta deliciosa que gusta a mayores y a niños.
Cómo hacer un delicioso arroz a la cubana
Hacer este plato no tiene ninguna dificultad. Cueces el arroz y mientras tanto, vas friendo el plátano, el huevo y calentando el tomate. Si aún no has comprado los ingredientes, decántate por un plátano macho a la hora de cocinar, ya que se freirán más fácilmente y aguantarán mejor el calor. Además, es mejor que lo frías con mantequilla, ya que le dará mayor cremosidad.
El huevo lo puedes cocinar al gusto. Bien es cierto que se suele dejar la yema sin cuajar para que podemos mojar en ella, pero puedes adaptarlo a tu gusto. Así mismo, si en vez de tomate frito dispones de tomate triturado, recuerda cocinarlo bien y echarle un poco de azúcar para rebajar la acidez. Como siempre decimos, ¡adapta la receta a los ingredientes que dispones y sácales el mayor partido!
El truco Brillante: ¡el plátano!
Todavía no es muy propio verlo en los hogares, pero en la receta original se acompaña el arroz, el tomate y el huevo con plátano frito. Es una opción deliciosa que le dará un poco de dulzor al conjunto. Freír esta fruta es propio de la cultura latina, que la sirve como acompañante de múltiples recetas. De hecho, este plato por sí mismo se suele servir con un poco de queso fundido, haciendo un contraste entre dulce y salado espectacular. Además, es una forma ideal de comer fruta, distinta y muy sabrosa.
A la hora de elegir un plátano para freír, debes tener en cuenta que no todas las variedades de esta fruta son aptas para este uso y que no todas van a quedar ricas estando fritas. La mejor variedad para este uso es el plátano macho o plátano verde. Se trata de una variedad de esta fruta que tiene una piel más gruesa y mayor cantidad de almidón que las bananas que comemos comúnmente a modo de postre o las que usamos para ciertas recetas de repostería.
Notarás que la carne de este tipo de plátano tiene una textura y un sabor diferente. Al morderlo en crudo, podrás comprobar que su textura es más arenosa y que no es para nada dulce. Esto se debe a que prácticamente no tiene azúcares ni hidratos de carbono. Sin embargo, las propiedades nutritivas de este plátano verde son prácticamente las mismas que las del plátano amarillo. La diferencia sustancial es que a la hora de cocinar con él, el plátano macho nos va a dar una mejor consistencia.
Ya te hemos dado todas las claves para hacer esta deliciosa receta. ¿A qué esperas para subir la música a ritmo cubano y ponerte manos a la obra? Sabroz te asegura el éxito.
